jueves, 8 de septiembre de 2011

EL MODELITO EN EL CAJÓN.

Entre que no juego nada -lo que se dice nada de nada- y que no escribo ningún post desde  hace más de un mes, este blog está abocado al fracaso. Vamos, que está más muerto que vivo. Yo, por si las moscas, voy a hacerle un masaje cardiaco a ver si consigo resucitarlo. ¡Allá voy!

En el sitio en el que vivo hay mucha afición al pádel aunque, yo creo, no tanta a la moda a la moda padelera. Cuando estoy en la pista miro de reojo a los demás jugadores y veo, sobre todo, mucha moda decathlonera. Lo cual es perfecto porque hay cosas que están muy bien y, sobre todo, tienen muy buen precio.

Sin embargo, a finales de julio me fui a mi tierra natal y ahí la cosa cambió. ¡Qué nivel, Maribel! Aparte de jugar casi todos los días una media de dos horas, me lo pasé en grande viendo los modelitos que por allí circulaban: distintas marcas -algunas desconocidas para mí-; combinaciones de colores inigualables; combinaciones perfectas de faldas, polos y calcetines; paleteros de flores...

Tanto es así que decidí que mis humildes conjuntos no daban la talla. Informada por mis amigas de que uno de los mejores sitios para equiparme "con estilo" era una tienda llamada The Game Padel y Golf, no lo dudé y allí me presenté.

Era época de rebajas y no quedaba mucho. Aún así encontré un conjunto de falda y camiseta de la marca Egalité que a mis hijos les gustó muchísimo, por aquello de la bandera.


 
A mi también me gustó, claro, y además estaba tan bien de precio que, después de mucho pensarlo -o quizás, no tanto-, al día siguiente me presenté otra vez en la tienda y me compré una segunda camiseta que me costó unos 12 euros -creo recordar-




Ese mísmo día pude estrenar mi conjunto "divino de la muerte". Desgraciadamente desde entonces está en el cajón del armario pues no he tenido más oportunidades de ponérmelo.

A ver si el verano que viene...